El Real Madrid ha arrancado la temporada 2025/2026 con una autoridad incontestable y además mejorando semana a semana: suma seis victorias consecutivas en LaLiga y un triunfo más en la Champions League, ante el Marsella, consolidando un arranque perfecto bajo la dirección de Xabi Alonso. El equipo blanco no solo se asienta como líder destacado del campeonato, sino que muestra solidez, recursos y alternativas en todas las líneas, dejando sensaciones inmejorables a sus seguidores y enviando un claro mensaje a sus rivales.

Un equipo imparable y reforzado

El principal argumento ofensivo es Kylian Mbappé, quien brilla por encima del resto como estandarte del proyecto madridista siendo el máximo anotador de la competición doméstica. El francés ha marcado goles decisivos tanto en liga como en Champions, aportando desequilibrio y pegada en cada partido. Pero el éxito del Madrid no se sustenta solo en la figura de Mbappé: los nuevos fichajes están respondiendo de manera extraordinaria. Carreras aporta solidez defensiva y salida de balón desde el lateral zurdo, Mastantuono se ha convertido en un comodín creativo en el centro del campo o escorado a la derecha y Huijsen ha mostrado una sorprendente madurez en defensa a pesar de su juventud. Este grupo, junto a pilares como Vinícius y un centro del campo de garantías, con Tchouaméni, Ceballos, Arda Güler y Camavinga, hace que el Real Madrid sea a día de hoy uno de los bloques más equilibrados de Europa.

Solidez, confianza y nuevos objetivos

La solidez se traduce en partidos resueltos con oficio sin apenas encajar apenas goles y con la sensación de tener recursos para superar cualquier situación adversa. Xabi Alonso ha dotado al equipo de una identidad reconocible, siendo capaz de dominar la posesión cuando lo requiere y de golpear con transiciones rápidas. La confianza es total en el vestuario y el mensaje es claro: el objetivo es luchar por todos los títulos y mantener esta dinámica ganadora.

La Quiniela y el pleno al quince

El próximo fin de semana, el derbi Atlético-Real Madrid acapara todas las miradas. No solo por el simbolismo de medirse a uno de sus eternos rivales en el Metropolitano, sino porque ese partido decidirá el pleno al quince de La Quiniela para una jornada que promete emociones fuertes. Los blancos buscarán su séptima victoria consecutiva en Liga, un golpe que podría hundir aún más a un Atlético que llega en mal momento y poner tierra de por medio en lo más alto de la clasificación.