El Real Madrid vive un inicio de curso 2025/26 marcado por su enorme dependencia de Kylian Mbappé como fuente goleadora. El delantero francés ha firmado 10 de los 18 goles del equipo, y solo otros cuatro futbolistas han conseguido ver puerta en este arranque, lo que subraya hasta qué punto el equipo de Xabi Alonso depende del talento y la eficacia del astro galo. Mbappé, además, está mostrando una efectividad espectacular: ha marcado esos 10 goles con apenas 13 disparos a portería de 24 intentos, una ratio que roza la excelencia y le sitúa como el máximo argumento ofensivo del Real Madrid en todas las competiciones.
Una efectividad sin precedentes y una preocupante falta de alternativas
La racha de Mbappé es digna de mención por el volumen y la precisión de sus goles, pero también desnuda una realidad preocupante para el Real Madrid. El resto del ataque blanco está lejos de su mejor versión: Vinicius Jr. sigue a la baja tras los problemas físicos del verano y aún no ha recuperado su chispa, mientras Rodrygo aún no se ha estrenado como goleador en la presente campaña. Futbolistas de segunda línea, como Bellingham o Camavinga, han aportado con cuentagotas, pero ningún otro se ha mostrado consistente en la definición, lo que limita el potencial del equipo a largo plazo si Mbappé no mantiene su ritmo.
Xabi Alonso busca la tecla
El técnico Xabi Alonso continúa en búsqueda de fórmulas para que otros jugadores asuman mayor protagonismo ofensivo y reduzcan la “Mbappédependencia”. Es clave para el futuro inmediato del Madrid encontrar soluciones colectivas que liberen al delantero y ofrezcan variantes en partidos atascados, especialmente en un calendario repleto de partidos exigentes donde la explotación única de Mbappé puede resultar insuficiente.
Jornada de La Quiniela y viaje exigente en Champions
Esta semana, La Quiniela intersemanal incorpora el boleto Champions, en el que el Real Madrid afronta un reto añadido: el largo desplazamiento a Kazajistán para enfrentarse al Kairat Almaty. Un encuentro, a priori, asequible contra un rival menor, pero que supone un reto logístico y físico para la plantilla, dado que se trata de un viaje de más de 7000Km. y una nueva oportunidad para que algún acompañante de Mbappé dé un paso adelante y empiece a compartir la responsabilidad goleadora de la plantilla blanca.