El pasado sábado, en uno de los duelos más emocionantes del boleto de La Quiniela, Antony Matheus dos Santos se convirtió en el salvador del Real Betis con un doblete memorable que rescató un empate 2-2 ante el Villarreal en La Cerámica. Cuando todo parecía perdido para los verdiblancos, que perdían 2-0 mediada la segunda parte, el brasileño apareció con dos zurdazos idénticos, ambos a pase de Fornals, para silenciar un estadio que ya cantaba victoria.
El regreso definitivo que tanto costó conseguir
La historia de Antony con el Betis es una de esas que mezcla talento, perseverancia y negociación. El brasileño llegó inicialmente cedido desde el Manchester United a mitad de la temporada pasada, donde deslumbró con nueve goles y cinco asistencias en apenas unos meses. Su rendimiento fue tan espectacular que se convirtió en el objetivo número uno de la dirección deportiva bética para esta campaña.
Sin embargo, conseguir su fichaje definitivo no fue sencillo. El Manchester United rechazó prorrogar la cesión, obligando al Betis a entablar una negociación compleja que finalmente se cerró por 22 millones de euros fijos más variables, con el United reservándose un 50% de una futura plusvalía. Incluso hubo momentos de tensión cuando cantidades pendientes de pago del club inglés estuvieron a punto de hacer naufragar la operación.
El impacto inmediato de un jugador diferencial
Desde su llegada definitiva, Antony ha transformado la dinámica ofensiva del Betis. Los números hablan por sí solos: desde que puso un pie en Sevilla esta temporada, el equipo de Manuel Pellegrini promedia al menos dos goles por partido en cada uno de los siete encuentros disputados. Su presencia no solo se traduce en goles, sino en una confianza renovada para todo el equipo.
El partido ante el Villarreal fue la máxima expresión de lo que Antony aporta: llegada oportuna, calidad técnica excepcional y, sobre todo, la mentalidad de no rendirse nunca. Sus dos goles, prácticamente calcados con sendos zurdazos desde fuera del área, demostraron por qué el Betis luchó tanto por retenerle.
Más que goles: el efecto Antony en el vestuario
Pero la aportación de Antony va más allá de los números. Su experiencia en grandes clubes europeos y su hambre de reivindicación tras los años difíciles en Manchester aportan una dosis extra de ambición al proyecto bético. En La Cerámica, cuando el marcador era adverso y las opciones parecían agotarse, fue él quien tiró del carro cuando más se necesitaba.
El brasileño ha encontrado en Sevilla no solo un club que confía plenamente en él, sino también el entorno perfecto para explotar su mejor versión. Su celebración tras el gol del empate en el minuto 94, con los brazos alzados ante una Cerámica silenciada, resume perfectamente lo que significa para este Betis: la diferencia entre la resignación y la esperanza.
La inversión que hizo el Betis por Antony está demostrando ser una de las mejores de la temporada, no solo por lo que aporta en el presente, sino por lo que promete de cara al futuro.
Recuerda que esta jornada hay doble boleto de La Quiniela, el de fútbol europeo con Champions y Europa League, y el del fin de semana con LaLiga en juego y el Clásico como protagonista.