El Getafe CF volvió a demostrar que, incluso en una temporada complicada, sabe cómo sobrevivir y sacar petróleo de cada partido. La victoria por 0-1 ante el Athletic Club en San Mamés, gracias al oportunismo de Borja Mayoral, devuelve la sonrisa a los de José Bordalás, que rompen una racha de dos derrotas consecutivas y escalan posiciones en la tabla.

Un triunfo de oficio en San Mamés

El encuentro fue una muestra del ADN que Bordalás ha inculcado en su equipo: trabajo, intensidad y eficacia. El Getafe supo sufrir cuando lo requería y golpear cuando el Athletic bajó la guardia. En un partido cerrado, Mayoral aprovechó una ocasión dentro del área en el minuto 75 para firmar un triunfo de enorme valor. El equipo del sur de Madrid, que llegaba con bajas importantes en defensa y con dudas por su reciente dinámica, fue capaz de neutralizar al conjunto bilbaíno en su propio terreno.

El técnico alicantino reconoció tras el encuentro que “el grupo entendió perfectamente lo que el partido pedía” y valoró la respuesta tras las últimas derrotas. Con este resultado, el Getafe iguala a los rojiblancos en la clasificación con 14 puntos y se coloca a tan solo una victoria de los puestos europeos.

Un rendimiento pragmático pero eficaz

Aunque el Getafe no brilla por su juego ofensivo, sí lo hace por su solidez y carácter competitivo. Los azulones han logrado sumar en tres de los últimos cinco partidos, con cinco puntos sobre quince, suficientes para dormir tranquilos en mitad de la tabla. En ese periodo, su fiabilidad defensiva y el liderazgo silencioso de jugadores como Luis MillaDavid Soria y el propio Mayoral, máximo goleador del equipo, han sido claves para mantenerse a flote.

El equipo se ha ganado su fama de conjunto incómodo: presiona alto, bloquea los circuitos rivales y aprovecha al máximo sus escasas oportunidades. En una liga tan apretada, esa virtud de saber competir en los detalles lo mantiene vivo y aspirando a metas más ambiciosas.

Próxima parada: duelo ante el colista

Sin tiempo para descansar, el Getafe afrontará la próxima jornada recibiendo al Girona, actual colista de LaLiga EA Sports, en un partido adelantado al viernes que no estará incluido en el boleto de La Quiniela. Una nueva oportunidad para los madrileños de seguir escalando y consolidarse en la parte media-alta de la clasificación.

El Coliseum se vestirá de confianza para recibir a un rival herido, pero Bordalás no quiere relajación: “Estos partidos son los más peligrosos, porque todos juegan su final”.

Un Getafe que siempre compite

Cada punto del Getafe es un ejercicio de resistencia, un recordatorio del estilo que lo define: competitivo, compacto y mentalmente fuerte. Tras semanas de dudas, el equipo de Bordalás ha vuelto a dejar claras sus credenciales: es un rival que nunca se da por vencido y que convierte cada victoria en un mensaje de supervivencia.