La UD Las Palmas logró salir del pozo de la tabla una vez se rescindió a Carrión y se dio entrada en el banquillo a Diego Martínez. Pero después de arrancar el técnico gallego en modo estelar firmando números de Champions, han vuelto los malos resultados a Gran Canaria.

Son ya cuatro partidos sin ganar y lo que es peor, tres de ellos han sido derrotas. Salvo la salvada ante el Osasuna con el gol de Januzaj en tiempo de descuento para sumar un punto, el resto de encuentros se contabiliza por derrota. 1 punto de los últimos 12 es la traducción de la situación y únicamente 23 puntos en la clasificación.

Y es que Las Palmas no puede despistarse, ya que el descenso lo marca el Alavés con 21 puntos, es decir, una derrota en la próxima jornada y de darse resultado positivo para los de abajo, podría devolver a la zona de peligro al club insular.

UN RIVAL DIFÍCIL PARA CAMBIAR DE RACHA

El problema es que el rival que se viene no será nada sencillo, puesto que llega al estadio insular el Villarreal de Marcelino, en uno de los partidos destacados del boleto de La Quiniela. Los castellonenses son quintos en la tabla y aspiran incluso a robarle la cuarta plaza al Athletic. Han sumado 10 puntos de los últimos 15, y la maquina del submarino parece empezar a carburarle al técnico asturiano.

Las estadísticas reflejan que Las Palmas ha recibido en Primera División en 6 ocasiones al Villarreal, firmando 3 victorias, por 1 empate y 2 triunfos del conjunto castellonense, el último hace dos temporadas por 0-2.