Levante y Alavés llegaron en tablas al Ciutat de Valencia en la vuelta de la final del play off de ascenso. Cuando parecía que el empate final después del tiempo reglamentario le valdría al conjunto granota, en el último segundo del partido, un penalti revisado por el VAR, fue transformado por Asier Villalibre para confirmar la victoria de los albiazules por 0-1 y confirmar el ascenso del Glorioso a Primera División.

Si bien es cierto que la escuadra de Vitoria fue mejor que el conjunto local, el tiempo pasaba y sin el gol que daba el triunfo, todo apuntaba a un desenlace positivo par los de Calleja. Así se plantaron en la prórroga, donde según establece la norma vigente, no habría penaltis al ser el ascenso para el equipo mejor posicionado en la tabla en la competición regular.

El Levante celebraba el ascenso cuando el luminoso marcaba el 123 de juego, pero una mano de Rober Pier, revisada y más que revisada por lo que estaba en juego, confirmó el penalti y el gol de Villalibre, que no falló desde los once metros.