El Girona firmó el pasado curso la mejor temporada de su historia, finalizando en cuarta posición y logrando una más que merecida clasificación para Champions League.

Esta temporada, celebró por todo lo alto poder disputar la máxima competición europea, pero al igual que ocurre con otros equipos que no están acostumbrado a participar en varias competiciones a la vez, le ha pasado factura a nivel doméstico.

Y es que en LaLiga, el equipo llamado a repetir la cuarta posición no solamente se ha visto superado por Athletic o Villarreal, que pelean por ser nuevo equipo de Champions, si no que además no está ni siquiera entre los equipos que pelean actualmente por la sexta plaza o incluso la séptima.

El motivo no es otro que una irregularidad impropia de un conjunto que parecía realmente solvente hace unos meses. Si bien es cierto que perdió a su máximo goleador, Dovbyk y también a Savinho, piezas claves el curso pasado, Míchel no ha dado con la tecla pese a sumar refuerzos de calidad como Van de Beek.

Con el empate de la última jornada ante el Espanyol, son cinco jornadas consecutivas sin ganar, aunque el dato positivo es que se ha puntuado en las dos últimas. Eso sí, son 2 puntos de los últimos 15, que les han llevado a situarse en mitad de la tabla con 33 puntos, ahora mismo más cerca de los puestos de descenso que de Europa.

El Alavés marca la zona de peligro y tiene 26 puntos, es decir, 7 menos que el Girona. Por su parte, el Betis suma ya 41 puntos, 8 más que la escuadra rojiblanca.

Esta jornada llega a Montilivi uno de los equipos que lucha por salir del pozo, el Valencia, que tiene 27 puntos en su casillero y que logró salir del descenso hace unos días. De ganar en Girona pondría en un serio apuro a los de Míchel. Partidazo en el boleto de La Quiniela.