El Real Madrid no termina de carburar en este inicio de noviembre. Los de Xabi Alonso pincharon en Vallecas, firmando un empate sin goles ante el Rayo en el partido que decidía el pleno al quince de La Quiniela. Aunque el punto les permite seguir líderes en LaLiga, la sensación general es de preocupación. El empate confirma una semana nefasta: ya venían de caer en Anfield ante el Liverpool en Champions, y en Vallecas se repitieron las dudas y la falta de pegada.

En Vallecas, ni Mbappé ni el Madrid logran brillar

El equipo blanco estuvo espeso, carente de ideas y, sobre todo, de chispa ofensiva. Las ocasiones solapadas de Güler y Vinícius se toparon con la defensa rayista y un Batalla inspirado. Mbappé, máximo referente merengue, no estuvo entonado y apenas generó peligro. Es el partido en el que menos ocasiones ha tenido desde su llegada, algo que inquieta al madridismo: cuando el francés no brilla, el Madrid se apaga.

Xabi Alonso busca soluciones tras Anfield y Vallecas

El técnico madridista movió el banquillo, buscando cambiar el partido con la entrada de CeballosRodrygo, y Trent, pero la reacción no llegó. El conjunto blanco acabó encerrando al Rayo, pero sin verdadero peligro, y en ningún momento asedió bien la portería local. Xabi Alonso reconoció que “el Rayo te exige mucho, no pudimos desequilibrar” y admitió que “no hubo fuelle ni intensidad” para romper el muro.

El liderato se sostiene, pero el debate crece

A pesar del empate, el Real Madrid sigue en lo más alto de LaLiga, aunque con el Barcelona, Villarreal y Atlético pisando los talones y la presión de una jornada donde el líder no pudo aprovechar el pleno al quince. El ambiente de Vallecas, siempre exigente, volvió a ser inexpugnable para los blancos, que ya suman tres visitas sin victoria en ese estadio.

La Quiniela y una jornada con sabor agridulce

El empate cerró el boleto de La Quiniela con un sabor amargo para los que confiaron en una victoria clara del líder, demostrando que en Vallecas siempre es posible la sorpresa. La falta de gol y de recursos ofensivos pone deberes urgentes para Xabi Alonso y deja un poso de inquietud en una afición que esperaba mucho más tras el fichaje de Mbappé y un prometedor inicio liguero.