El Real Madrid perdió en Vallecas una oportunidad única de alcanzar el liderato de LaLiga y es que se dejó dos puntos ante un Rayo que aprovechó las debilidades defensivas de los de Ancelotti, en uno de los duelos destacados del boleto de La Quiniela.

Pese a marcar tres goles el Real Madrid, el club franjirrojo les logró empatar endosándoles nada menos que tres tantos. Y es que la racha de goles recibidos por Courtois es realmente importante con 16 goles en los últimos 10 encuentros.

Un cifra realmente elevada para un equipo acostumbrado a recoger pocas veces el balón de su portería y que deja claro carencias defensivas importantes, en gran parte justificado por las continuas e importantes bajas en la línea más determinante. Y es que sin Carvajal ni Militao, el Real Madrid está cojo en defensa.

Lucas Vázquez lo intenta pero no alcanza el nivel del capitán, que estaba en su mejor momento antes de caer lesionado ante el Villarreal. Lo mismo ocurre con la baja del brasileño para todo el curso. Rüdiger sólo no alcanza y ya sea con Asensio, ahora ya desaparecido de los planes de Ancelotti, o con Tchouaméni, el alemán no es el mismo y ese descuadre afecta directamente a todo el plantel.

Tampoco ayuda la baja de Camavinga en la medular, ya que el francés es uno de los jugadores que más balones recuperaba. Lo dicho muchas lesiones y sin plan B por parte del entrenador.

NO TODO SON MALAS NOTICIAS

Pero hay algunas cosas positivas y es que después de una primera parte del curso sin mucha pegada, el Real Madrid está recuperando su versión prime a nivel ofensivo y eso que Mbappé no está fino y Vinicius ha estado lesionado. Las cifras son las siguientes: 19 goles en los últimos 8 partidos. Es decir, una media de 2,4 tantos por encuentro, siendo Bellingham el jugador más determinante.