El Villarreal ha empezado la temporada 2025/26 con paso firme y dejando claro que quiere ser el gran animador de LaLiga, dispuesto a competir hasta el final frente a Barcelona y Real Madrid. Con 16 puntos en siete jornadas, los de Marcelino solo han sufrido una derrota y marchan terceros en la clasificación, a solo tres puntos del líder, el Barcelona, sostenidos por un fútbol valiente y una plantilla que mezcla experiencia con talento joven.
Un equipo en crecimiento y sin temor
La solidez defensiva y la facilidad para ver puerta han sido las señas de identidad del Villarreal en este inicio, donde han ganado cinco partidos, empatado uno y solo han tropezado en uno. El bloque ha mostrado personalidad tanto en casa como a domicilio, capaz de golear —como ante el Girona— y de resolver duelos cerrados, como el reciente triunfo ante el Athletic, rival directo en la conocida como otra Liga fuera de los tres tenores. El Villarreal es, ahora mismo, la alternativa más clara a los dos gigantes e incluso pone en jaque al Atlético, que tendrá que remar contracorriente para alcanzarlos, y transmite la sensación de equipo en progresión.
Semana de alta exigencia y La Quiniela
La exigencia sube un peldaño en este tramo del calendario. Este miércoles, los amarillos se medirán a la Juventus en competición europea, un reto que pondrá a prueba la profundidad de la plantilla antes de visitar el próximo fin de semana al Real Madrid en el Bernabéu, duelo que destaca en el boleto de La Quiniela. Este partido será determinante tanto para las opciones de los castellonenses en la pelea por los puestos de privilegio como para los apostantes que buscan el pleno al quince.
En resumen, el Villarreal apunta alto y quiere ir más allá del papel de tercero en discordia: la regularidad, la calidad en todas sus líneas y el hambre de un grupo que no teme a nadie lo convierten en la gran amenaza de los favoritos en el campeonato.