Las bajas de Tchouaméni y Camavinga dejan muy mermada la medular del Real Madrid tras el parón de selecciones, por lo que Carlo Ancelotti deberá recuperar su plan exitoso de antaño, que este curso estaba teniendo un papel secundario.

Hablamos de Toni Kroos y Luka Modric. Los dos veteranos futbolistas, artífices de la época más brillante del último siglo, siendo clave en la consecución de las últimas Champions League, tendrán que volver a tirar del carro ante las bajas de sus compañeros.

El plan de dosificar al alemán y al croata queda en segundo plano, y es que al menos hasta el próximo enero, cuando Tchouaméni regrese, o al menos hasta que Ceballos tenga el alta médica, serán ambos los dos protagonistas de liderar el centro del campo blanco.

Este curso, Modric, de 38 años, solamente ha disputado en el once titular 6 de los 17 encuentros oficiales disputados por el club de Chamartín. Ahora le tocará volver a coger la batuta.

Por su parte, Kroos, si que ha mantenido su rol de titularidad, aunque descansando más de lo esperado. Ha formado parte del once inicial en 9 ocasiones de los 17 partidos disputados, eso sí, ha participado en todos los partidos a excepción del choque ante el Braga en Portugal correspondiente a la fase de grupos de la Champions League.

Ahora ambos están obligados a dar un último servicio en favor del Real Madrid, que sabe que calidad tienen de sobra para suplir con solvencia a los jóvenes franceses, que este curso les habían enviado directamente al banquillo. Ancelotti tiene confianza plena en ellos.

Ante el Cádiz, duelo destacado del boleto de La Quiniela, el once del Real Madrid volverá a ser inédito y es que el gran número de bajas que presenta por culpa de las lesiones, obligará al italiano a probar con un esquema distinto.