Los números no engañan. Según los datos de Opta, Kylian Mbappé se ha convertido en el tercer jugador del siglo XXI que anota en cuatro Clásicos consecutivos, una racha solo lograda antes por dos leyendas: Ronaldinho en su etapa más brillante con el Barça y Cristiano Ronaldo durante sus años de esplendor en el Real Madrid.
De la promesa al tormento del Barcelona
Mbappé llegó al Real Madrid con la etiqueta de galáctico, pero su rendimiento en los Clásicos ha superado cualquier expectativa. Desde su debut como profesional, el delantero francés ha marcado 12 goles en apenas 9 enfrentamientos ante el Barcelona, con PSG y Real Madrid, cifras que lo colocan en el selecto club de los verdugos históricos del conjunto azulgrana en este siglo. Para ponerlo en perspectiva: Cristiano Ronaldo anotó 20 goles en 34 Clásicos; Karim Benzema, 16 en 46. Mbappé, con menos de una decena de duelos, ya compite con ellos en eficacia y regularidad.
Un registro demoledor, un liderazgo indiscutible
La victoria del Real Madrid por 2-1 en el Clásico de este pasado domingo 26 de octubre, con gol incluido de Mbappé, no solo consolidó el liderato de los blancos con 27 puntos, cinco más que el Barça, sino que también reforzó la figura del francés como auténtico referente del proyecto de Xabi Alonso. En este partido, decisivo además por definir el pleno al quince de La Quiniela, Mbappé volvió a marcar diferencias desde el primer minuto, combinando velocidad, lectura táctica y una precisión clínica frente al arco rival.
El atacante no solo se ha especializado en castigar al Barcelona, sino que también ha mostrado una constancia asombrosa: ha marcado en el Bernabéu y en Montjuïc, en Supercopas, Copas y Ligas, en noches de presión y gloria. Su instinto competitivo parece crecer ante los azulgranas, como si cada Clásico fuera una cita personal con la historia.
Mbappé, la nueva bestia negra del Barcelona
Lo que Cristiano representó para varias generaciones de madridistas, Mbappé empieza a asumirlo hoy: un jugador que no se deja intimidar por el escenario ni por la rivalidad. Sus goles, su carácter y su influencia lo han convertido en un símbolo de superioridad en los duelos ante un Barça que sufre cada vez que el francés entra en acción.
A sus 26 años recién cumplidos, Mbappé ya escribe su propio capítulo en la rivalidad más grande del fútbol mundial. Los números avalan una trayectoria que apunta a la leyenda: eficacia, constancia y, sobre todo, un impacto que recuerda a los más grandes. En el Bernabéu ya hay consenso: Kylian Mbappé no solo vino a ganar partidos, vino a marcar una era… y el Barcelona lo está sufriendo en carne propia.